Estatua del dios egipcio Thoth representado en babuino o mono cinocéfalo, museo del Louvre.

Si la mayor cualidad de Thoth fue haber sido inteligente, su mayor virtud fue sin duda haber sido siempre sabio y competente. Su origen muy antiguo se remonta a la historia que lo dio a luz a partir del cráneo de Set. Sin embargo, Thoth curiosamente no presenta ninguno de los lados malos del terrible Dios. Thoth no manipula para su propio beneficio y trabaja por el contrario incesantemente por la permanencia del mundo querido por Re.

Los griegos lo asimilaron a Hermes por sus atributos y funciones similares y los romanos a Mercurio. Uno de los títulos de Thoth "Tres Veces Grande" ha sido traducido al griego: τρισμεγιστος (Trismegisto), refiriéndose a Hermes Trismegisto.

Las leyendas que describen a Thoth lo asocian con el conocimiento y más generalmente con la organización del mundo celestial y terrestre. Su inteligencia y pragmatismo sirvieron de modelo para el Egipto faraónico y su administración altamente organizada, por lo que Thoth fue un Dios modelo para los mortales.

Con el Verbo, Thoth creó el mundo. Así, la cosmogonía Hermopolita representa el origen del mundo. Un mundo que ciertamente fue creado, pero que aún tenía que ser organizado. La inteligencia estaba en el corazón de Thoth. Es a ella, ayudada por Sia, personificación del conocimiento, a quien los mortales le deben el mundo tal como es. Hablar, calcular, escribir, crear era una obra gigantesca, Thoth entonces inventó el lenguaje para este propósito.

A través del Verbo hecho inteligible, el mundo fue construido según los deseos de Dios. La gran mecánica universal de los cuerpos celestes comenzó a funcionar.

Sin embargo, sin la justicia de Maat, que se sienta con los Dioses, pero también en los corazones de los hombres, el mundo no sería nada. Por lo tanto Thoth es también "el que escribe Maat". En todos los puntos, el conocimiento, la organización, la justicia, Thoth es un verdadero modelo para los hombres, empezando por el Rey o el Faraón y su administración.

Thoth goza de la más alta estima entre los otros dioses. No se contenta con sentarse en los tribunales divinos, es el secretario de ellos, que aprueba y registra los veredictos. Es el Guardián de los Sellos. Thoth no deja de intervenir a menudo en las disputas entre los Dioses. El papel activo que desempeña en la resolución del conflicto entre los dos enemigos de siempre, Set y Horus, le ganó mucho respeto. Como hábil árbitro, fue "el que logró separar a los dos combatientes". Una hazaña que se admira cuando se conoce el odio entre Set y su sobrino.

Un texto de Edfú relata su nacimiento:

"En medio del océano primordial apareció la tierra emergida... En ella, los ocho llegaron a la existencia. Hicieron aparecer un loto del que salió Re, asimilado a Shu. Luego vino un brote de loto del que surgió una enana, una auxiliar femenina necesaria, que Ra vio y deseó. De su unión nació Thoth que creó el mundo a través de la Palabra".